La leche de avena es una de las mejores bebidas que puedes incluir en tu dieta. Esta contiene una gran cantidad de vitamina B, que se encarga de mantener sano y fuerte el sistema nervioso central. De igual manera, esta bebida es mucho más digestiva que la leche animal, por lo que se recomienda especialmente para aquellas personas que sean intolerantes a la lactosa.
Por otra parte, la leche de avena ayuda a regular los niveles de azúcar en la sangre, ayuda a reducir el colesterol, y, por si fuera poco, se encarga de fortalecer los músculos y huesos. Incluir la leche de avena es una excelente idea, si no lo habías considerado ya.
En este sentido, a continuación encontrarás toda la información que necesitas para preparar una deliciosa leche de avena.
Ingredientes
Los ingredientes de esta receta, además de ser pocos, se pueden conseguir fácilmente en cualquier supermercado o tienda, y por si fuera poco son muy económicos. Así que esta puede ser una excelente opción para ti si quieres preparar una deliciosa bebida para consumir a diario o para invitar a tus invitados.
Ahora sí, estos son los ingredientes que necesitas para hacer esta receta:
- 1,2 litros de agua
- 60 gramos de avena en hojuelas.
- 1/4 de cucharada de sal
- Azúcar morena, panela o tu endulzante preferido al gusto
- Esencia de vainilla, canela en polvo o aceite de coco para saborizar (opcional)
Preparación de la Leche de Avena
Lo primero que necesitas hacer es remojar la avena. Vierte la avena en un recipiente y cúbrela con agua. Asegúrate de que el agua no sobrepase demasiado la cantidad de avena, sino que simplemente alcance a cubrirla. Ahora, tapa la mezcla y déjala reposar por 8 horas.
Una vez pasen el tiempo de remojo, cuela la avena para quitarle el exceso de agua. Es importante que la avena quede bien escurrida, así que ayúdate un poco con una cuchara o con otro implemento para que tu avena quede únicamente con el agua necesaria.
Luego, lleva la avena a la licuadora y empieza a añadir el agua, la sal, el endulzante y el saborizante preferido. Después licúa los ingredientes hasta que todo quede bien integrado y la mezcla tenga una apariencia homogénea.
Cuela el líquido con un colador de tela para extraer los copos de avena y los residuos que no se hayan disuelto completamente.
Vierte la leche de avena en una jarra y déjala reposar por una hora en la nevera antes de empezar a consumirla. Así se podrán mezclar mejor los ingredientes y la leche va a adquirir un mejor sabor.
Para terminar, ten presente que una vez prepares tu leche de avena la puedes conservar en la nevera hasta por 4 días. Entonces si quieres hacer una buena cantidad para varios días no hay ningún problema.
